DANIEL HERNANDEZ - FITOGRAFIAS

DANIEL HERNÁNDEZ

FITOGRAFÍAS

Jueves, 03 de noviembre, 20:00 
Al 15 de diciembre de 2011 23:00

LA GUYABA VERDE
 Av. Rómulo Gallegos, Edif. Pascal, Torre B, local 2. 
Diagonal a la torre KLM , 

Caracas - Venezuela

 Invitación

Sobre el mundo se dice lo percibido; sólo cuando se siente asombro al observar algo en la naturaleza que aunque pueda ser conocido para quien lo ve, no deja de asombrar con alto brillo, bien sea por su naturaleza física o por otras connotaciones formales que terminan encallando en la memoria por largo tiempo. Precisamente por ese asombroso atractivo que llamó a una detenida lectura y que sí se pretende describir con justicia, no está lejos de ser una crónica de la emoción donde se desarrolla de manera simple la profundidad de ver.

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La obra de Daniel Hernández es una suerte de crónica de tal emoción. Si bien sus representaciones son netamente experimentales, atienden a la aceleración de los cambios en el arte sin alejarse de sus concepciones y sus códigos más típicos respondiendo a las pautas técnicas, poéticas y formales que abordan lo sinestésico desde todos sus órdenes. Es un trabajo que evoca el silencio, la temperatura y el contraste de tonos, que a su vez disiente con las líneas y manchas que recorren la obra en distintas direcciones dinamizándolas. Si bien estas obras se realizaron bajo un esquema conceptual donde lo importante era evocar un estado de plena armonía, demuestran una forma de representación con ritmos compositivos que alegorizan al paisaje. Esta obra nos presenta la naturaleza desde su interior. Renuncia a una descripción real del entorno y a una topografía verificable que no se acentúa en una mímica de las cosas; las convierte en alegorías o en metáforas definitivas. 

FITOGRAFIAS busca la representación alegórica del hecho natural; observa el silencio con cierta carga emotiva plasmándolo en un esquema refinado; muestra una especie de naturaleza humana que se desplaza desde un punto de vista no retórico ni representativo y que demuestra ese algo natural que proviene de la memoria y su significancia emotiva.1 Daniel desarrolla una simplicidad particular que busca accionar y destacar una modulación de los espacios donde toma presencia la orquestación de lo no dicho, del vacío, y que ante éste adquiere casi una categoría de signo. Un vacío que está dimensionado por espacios no creados, un vacío como el silencio “que sucede a los acordes y que no tiene nada que ver con un silencio corriente: es un silencio atento, es un silencio vivo.” 2

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1. “… también hago bocetos, pero creo que copiar la naturaleza no tiene ningún sentido para mí, pues pinto mejor de memoria que frente a un paisaje. – Mayormente observo los movimientos físicos de las montañas, el agua, los árboles y las flores… , Pintar tan sólo no me resulta suficiente… , percibo un árbol tintado de otoño en verano con mis sentidos más profundos y mi corazón, esa melancolía es la que quiero pintar…”

-Egon Schiele, en una carta a frans Hauser-

2. John Cage en: CHARLES, Daniel: Para los pájaros, conversaciones con John Cage, Monte Avila Editores, Venezuela, 1981.

Agradecemos a Daniel Hernández por el envío de la invitación